En los últimos días, el recién asumido presidente de EE.UU, Donald Trump, hizo una serie de anuncios relacionados a la imposición de aranceles a las importaciones. Los países afectados por el momento son México, Canadá y China. Todo apunta a una posible nueva guerra comercial y la reacción de los mercados podría no ser menor.
Específicamente, el jefe de la Casa Blanca firmó una orden para que los productos canadienses y mexicanos tengan un arancel del 25%, mientras que la energía proveniente de su vecino del norte y los bienes del gigante asiático serán gravados con un 10 por ciento.
“Esto se hizo debido a la gran amenaza de los extranjeros ilegales y de las drogas mortales que matan a nuestros ciudadanos, incluido el fentanilo”, aseguró Trump en la red Truth Social.

El bloque europeo tampoco quedaría exento de este tipo de medidas. “¿Voy a imponer aranceles a la Unión Europea? ¿Quieren una respuesta veraz o debo darles una respuesta política? Absolutamente. La Unión Europea nos ha tratado muy mal”, dijo el presidente estadounidense desde la Oficina Oval.
En todos los casos hubo reacciones y contraofensivas. La Comisión Europea advirtió que la UE “responderá con firmeza” si se le aplican aranceles aduaneros “injustos”.
Por su parte, el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, anunció que impondrá aranceles del 25% sobre productos estadounidenses por valor de 155.000 millones de dólares canadienses (USD 106.000 millones). Y desde el gobierno chino afirmaron que tomarán “contramedidas correspondientes” para “salvaguardar firmemente” sus derechos e intereses.
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, informó en sus redes sociales: “Instruyo al secretario de Economía para que implemente el plan B que hemos estado trabajando, que incluye medidas arancelarias y no arancelarias en defensa de los intereses de México”.

Expectativas
La última reacción que queda por ver es la de los mercados. Una pista de lo que podría suceder es lo que pasada la medianoche boreal ocurría con las criptomonedas. Una revisión a las 20 principales por capitalización de mercado arrojaba que estaban todas en terreno negativo, con bajas que iban del 1 a poco más de 20% en las últimas 24 horas, de acuerdo al portal Coinmarketcap.
Las expectativas no son las más optimistas.
El director de IEB, Norberto Sosa, analizó: “Si bien la potencial suba de aranceles ya había sido anticipada por Trump, inicialmente dejó la sensación de que quizás no las aplicaría. Por lo tanto, los anuncios sorprendieron al mercado”. Según Sosa, un aumento de tarifas siempre puede llegar a significar una mejora, aunque sea marginal, en los ingresos del Tesoro estadounidense, y a pesar de que es una buena noticia para la deuda, hay otras cuestiones que podrían neutralizar dicho beneficio.
Con todo, aseguró que cada vez que hay una sorpresa que es considerada negativa, la reacción del mercado es de “risk off” (reducir el riesgo), lo que perjudica a las acciones. Al mismo tiempo, se suele generar un efecto de flight to quality, esto es refugio en activos más seguros, lo que lleva a aumentar la proporción de cash en los portafolios y buscar deuda de más calidad.
“La guerra comercial ya empezó”, aseguró, por su parte, Gustavo Neffa, director de Research for Traders. Y opinó que debería impactar negativamente en los mercados: caída en las bolsas, en el precio del petróleo y el resto de los commodities; aumento del oro, baja de las tasas de interés por la mayor aversión al riesgo y fortalecimiento del dólar.
Fuente: Infobae