El titular de Economía y Producción manifestó la preocupación sobre el discurso de Lula da Silva en la Cumbre del Mercosur.
El ministro de Economía y Producción de Tucumán, Daniel Abad, se refirió en una entrevista con el programa Los Primeros (Canal 10) al planteo realizado por el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, durante la reciente Cumbre del Mercosur. El mandatario brasileño solicitó facilitar el libre comercio de azúcar en el mercado argentino, lo que generó una inmediata reacción por parte del Gobierno provincial y del sector productivo local.
Al respecto, Abad aseguró que las declaraciones de Lula fueron recibidas “con mucha preocupación”. “Esto no es nuevo. Brasil siempre ha querido financiarse del mercado sucroalcoholero argentino porque ellos al tema del azúcar, del alcohol básicamente y del bioetanol lo han venido subsidiando durante muchísimos años”, explicó el funcionario. En ese sentido, advirtió que esta política de subsidios hace que la industria brasileña “tenga tasas muy bajas y dificulte a la industria argentina competir con ellas”.
“Nosotros nos opusimos tenazmente a que eso –la apertura del mercado argentinon– ocurra y lo vamos a volver a hacer”, aseveró el ministro Abad.
Asimismo, el titular de Economía y Producción apoyó el comunicado emitido por diferentes organizaciones del sector azucarero del NOA (Centro Azucarero Argentino, Unión Cañeros Independientes de Tucumán, Centro de Agricultores Cañeros de Tucumán, Unión Cañeros Independientes de Jujuy y Salta, Cañeros Unidos del Este, Unión Cañeros del Sur).
“Estamos junto a los sectores productivos en la provincia y los defendemos. El sector privado genera inversión y trabajo; si a ellos les va bien, también a nosotros en el aspecto tributario. No nos vamos a quedar quietos y vamos a defender la industria madre con uñas y dientes”, subrayó.
El Ministro recordó además que a principio de 2024 el gobernador, Osvaldo Jaldo, consiguió que el artículo 59 que derogaba la Ley del Azúcar fuera eliminado de la Ley de Bases que impulsaba el Gobierno nacional, norma que fija los aranceles de importación para que el azúcar de otros países, como Brasil y Estados Unidos, que está subsidiada, no entre a la Argentina
“En ese momento, se sacó ese artículo de la ley y eso quedó sin efecto porque se entendió que el perjuicio a provincias como Tucumán, Salta y Jujuy, que producen azúcar y alcohol, era muy grande comparado con el beneficio que puede tener algún consumidor de Buenos Aires para pagar el azúcar un poco más barato”, explicó Abad.
Por último, Abad sostuvo que las diferentes actividades regionales, además de la industria azucarera, como el citrus y el arándano “tienen un efecto multiplicador”, por eso “la Provincia trasmitió a la Nación la preocupación sobre la apertura de la economía argentina”.