No tenían ni idea de a quién estaban por asaltar, mucho no les importó y terminaron presos. Dos sospechosos interceptaron a un sargento de la Policía Federal Argentina cuando salía de su casa vestido de civil. Le apuntaron con un arma de utilería para robarle el auto y la reconoció. Y entonces se defendió a los golpes. Una patrulla de la Bonaerense vio lo que sucedía y atrapó a los delincuentes.
Ocurrió en el populoso partido de La Matanza, más precisamente en la localidad de La Tablada. Y los sospechosos fueron capturaron tras la intervención de personal de la DDI local que realizaba tareas encubiertas en el marco de una orden de servicio vinculada al incremento del robo de autos en la zona.
El episodio este miércoles, cuando los agentes, que recorrían de manera dinámica distintas localidades, advirtieron una situación sospechosa en la intersección de Riobamba y Curapaligüe.
Allí observaron a dos hombres vestidos con ropas oscuras, uno de ellos portando un arma, mientras forcejeaban con otro sujeto que pedía ayuda junto a un Fiat Punto azul.
Los investigadores se identificaron como policías y ordenaron a los sospechosos que depusieran su actitud. Sin embargo, ambos intentaron escapar, lo que dio inicio a una breve persecución a pie. A unos 50 metros del lugar fueron reducidos y detenidos.
En poder de uno de ellos se incautó una pistola de utilería negra, similar a un arma calibre 9 milímetros, explicaron las fuentes del caso.
La víctima de 52 años es un sargento primero de la Policía Federal Argentina, numerario de la División Objetivos Especiales.
Según se estableció luego, el PFA estaba por salir de su domicilio ubicado en Riobamba al 200 con su vehículo particular, cuando fue interceptado por los agresores.
Al advertir que el arma utilizada no era real, se trabó en lucha con ellos hasta que arribó la comisión policial que ya se encontraba desplegada en la zona.
Los aprehendidos fueron identificados como DE.B., de 18 años, y L.Y.R., de 21. Ambos quedaron bajo custodia a disposición de la UFIyJ N° 20 de La Matanza, desde donde se dispuso el traslado de los detenidos a sede judicial para la primera audiencia y las diligencias de rigor.
El procedimiento permitió además esclarecer que los acusados actuaban bajo la modalidad de robo automotor a mano armada, que en este caso empleaba un arma réplica para amedrentar a la víctima.
Robos de autos
En las últimas horas, un sospechoso de 19 años fue detenido en Mar del Plata tras una investigación por el robo de un auto a una empleada judicial, y la Policía Bonaerense encontró en su vivienda varias armas y casi dos kilos de marihuana.
Según informaron fuentes policiales, todo comenzó el 12 de agosto pasado, cuando una empleada judicial de la ciudad balnearia denunció que dos personas la habían increpado al intentar subir a su Peugeot 2008, estacionado en la esquina de Rawson y General Alvear.
La víctima relató que, mientras salía de su trabajo y se dirigía a su coche, dos hombres la atacaron, la empujaron y le sacaron las llaves, escapando con el vehículo.
Durante el robo, escuchó a uno de ellos decir: “¡Tirale! ¡Tirale!”. Y más tarde supo por un testigo que uno de los ladrones estaba armado.
El rodado fue hallado ese mismo día unas horas más tarde. Lo encontraron estacionado en la entrada de la Escuela de Educación Secundaria Nº32, en la calle Goñi al 1800. En tanto, personal policial advirtió dos huellas en el portón trasero.
Con estos datos, los investigadores hallaron una coincidencia con un joven llamado Julián Ernesto Ortiz, de 19 años. A partir de este informe policial, desde la Oficina de Delitos contra la Propiedad Automotor (ODEPA) -la fiscalía especializada en delitos automotores que conduce la fiscal Lorena Hirigoyen-, se solicitó una orden de allanamiento para una vivienda localizada en la calle William Morris al 8200. El procedimiento se llevó a cabo este miércoles y atraparon al sospechoso.