En un operativo realizado en el barrio 1-11-14 de Flores, personal de la Policía de la Ciudad junto con fuerzas federales detuvo a D.G.Z., acusado de participar en el homicidio del gendarme Jorge López, ocurrido el 3 de septiembre de 2024 en Florencio Varela, en la zona sur del conurbano bonaerense. El sospechoso, de 46 años, era buscado intensamente desde hacía meses y registraba una orden de captura internacional con alerta roja de Interpol por este caso.
El procedimiento se concretó este jueves cerca de las 18:45, tras varios días de tareas de inteligencia y vigilancia. Investigadores de la División Unidad Táctica de Pacificación V, junto con personal de Gendarmería Nacional y la policía bonaerense, habían recibido distintas informaciones sobre la posible presencia del prófugo en una de las manzanas del barrio. Finalmente, el despliegue permitió localizarlo y reducirlo en la vía pública, sin que opusiera resistencia.
Zarini es sindicado por la justicia como uno de los autores del asesinato de Jorge López, quien tenía 33 años y se desempeñaba como efectivo de Gendarmería Nacional. Era conocido entre sus allegados por su dedicación al trabajo y por participar en acciones comunitarias en su barrio de Florencio Varela, según recordaron sus amigos y familiares tras el trágico hecho.
Jorge, además de su actividad en la fuerza, también recurría a realizar viajes a través de aplicaciones de transporte para generar ingresos adicionales y sostener a su familia. Y fue en mientras se desempeñaba como chofer que terminó siendo víctima de un violento asalto que devino en su muerte.
La noche del 3 de septiembre de 2024, López circulaba por la zona sur del conurbano bonaerense y tomó un pedido a través de la aplicación que utilizaba. Dos hombres subieron al vehículo simulando ser pasajeros. El viaje avanzó normalmente hasta que los supuestos clientes lo amenazaron y le exigieron que entregara el auto.
Ante la resistencia de López, los asaltantes comenzaron a golpearlo y el gendarme falleció a causa de las lesiones que sufrió. Los agresores escaparon en el auto, que abandonaron algunas horas después en una localidad cercana, hecho que facilitó la obtención de pistas para la investigación policial.
Desde el inicio de la causa, la policía bonaerense junto con la policía porteña y fuerzas federales coordinaron tareas de investigación para dar con los responsables. Dos semanas después del hecho, lograron dar con el primer sospechoso, identificado como M.A.M., quien fue arrestado en Claypole tras un operativo. Sin embargo, la búsqueda de su cómplice se prolongó durante casi un año.
A partir de nuevas pistas recibidas por las áreas de investigación a comienzos de julio, la Policía de la Ciudad comenzó trabajos de vigilancia en distintas manzanas del barrio 1-11-14, uno de los más complejos de la capital.
Este jueves, efectivos de la División Unidad Táctica de Pacificación V interceptaron al presunto agresor en la esquina de Janner y Crespo. Al corroborar su identidad, comprobaron que sobre el sospechoso pesaba una orden de captura en el marco de la causa instruida por el Juzgado de Garantías N.º 5 de Florencio Varela, y una alerta roja de Interpol.
El arresto fue notificado al magistrado Sebastián Ibáñez, a cargo del Juzgado Nacional de Rogatoria, quien dispuso la detención, notificación de la causa y otras medidas judiciales.
