Este lunes, en la localidad de Comandante Nicanor Otamendi, ubicada en el partido de General Alvarado, a 38 km de Mar del Plata, se realizó una movilización con el objetivo de que no se concrete la prisión domiciliaria para Adrián Buitrón, condenado a siete años por abuso sexual contra tres menores. “Todo el pueblo está unido, todo el pueblo pidió que marchemos”, expresó Roxana, madre de una de las víctimas.
La convocatoria, que tuvo punto de inicio en la intersección de San Martín y Pueyrredón, fue impulsada por familiares y allegados de las víctimas, que aguardan por la resolución de la apelación presentada por los abogados.
El martes 24 de junio la Justicia condenó a siete años de prisión de cumplimiento efectivo. Sin embargo, tan solo 72 horas después de la sentencia se le otorgó el beneficio de arresto domiciliario.
Roxana le relató al medio local 0223 que la familia se enteró de la medida sin previo aviso: “Cuando el Tribunal dictó la sentencia dijeron que era de efectivo cumplimiento y apenas 72 horas después firmaron la domiciliaria. Se saltaron muchos pasos, nos tendrían que haber dicho y queremos tratar que se revoque”.
Los hechos por los que fue condenado Buitrón ocurrieron en su domicilio de Comandante Nicanor Otamendi durante tres “pijamadas” en noviembre de 2019, agosto de 2020 y octubre de 2020. En esas ocasiones, el hombre manoseó y se masturbó al lado de tres amigas de su hija que se habían quedado a dormir en su casa.
La investigación se inició cuando una de las víctimas logró relatar lo sucedido a una docente, quien, junto al personal del establecimiento educativo, citó a los padres y les advirtió que, de no denunciar el hecho, lo haría la propia institución.
El Tribunal Oral en lo Criminal N°1, integrado por Ricardo Perdichizzi, Paula Soulé y Fabián Riquert, consideró probados los tres episodios denunciados, en línea con lo planteado por el Ministerio Público Fiscal y los abogados Maximiliano Orsini y Carlos Disipio, representantes del particular damnificado.
En la sentencia, los jueces descartaron eximentes de responsabilidad penal, aunque valoraron como atenuante la ausencia de antecedentes penales y la patología psiquiátrica del acusado.
Entre los agravantes, el tribunal ponderó la magnitud del daño, el aprovechamiento del estado de indefensión y el vínculo de confianza que unía a Buitrón con las niñas y sus familias. Se destacó la asimetría de poder y conocimiento, señalando que el condenado “hizo abuso de confianza del vínculo que los unía con las niñas y sus familias”.
Buitrón, que había llegado al debate en libertad, fue esposado en el séptimo piso de Tribunales apenas finalizó la audiencia y trasladado por orden judicial a la Unidad Penal N°44 de Batán.
Una nena denunció en la escuela que fue abusada por el inquilino de su familia
Un hombre de 35 años fue arrestado en el partido de Moreno después de que una menor denunciara en su escuela que había sido víctima de abuso sexual y violación por parte de un antiguo inquilino de su familia, identificado como “Luis”.
Tras la intervención de las autoridades escolares, el caso pasó a la Fiscalía y se inició una investigación a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción N°2 y el Juzgado de Garantías N°1 del Departamento Judicial de Moreno-General Rodríguez.
Personal de la DDI realizó tareas de campo y, a pedido de la Fiscalía, se ordenó un allanamiento en un domicilio de la zona, donde fue detenido J.L.C.A. y se incautaron tres teléfonos celulares.
La causa está caratulada como “abuso sexual agravado por acceso carnal – reiterado – y corrupción de menores agravada en concurso real entre sí”, y el sospechoso permanece detenido mientras la investigación continúa bajo control judicial.
El procedimiento policial recibió el aval del Ministerio Público Fiscal, que dispuso las medidas procesales y la continuidad de las diligencias.