Tragedia en Santa Fe: fue a cazar, lo confundieron con un chancho salvaje y murió baleado

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La víctima había pedido permiso para cazar en ese campo (Imagen ilustrativa de archivo: Pixabay)

Lo que fue pensado como una noche de entretenimiento entre amigos finalizó en tragedia en un campo de la localidad de Aguará Grande, en Santa Fe. Un hombre que había ido a cazar fue confundido con un chancho salvaje y recibió un disparo mortal.

Iván Eduardo Mangold, de 41 años, fue con su primo en la noche del pasado martes 13 de mayo a un campo en el que habían realizado trabajos de desmonte. Como habían visto la presencia de chanchos salvajes en la zona, le pidieron permiso al dueño del lugar para ir a cazar.

Al mismo tiempo, por otro sector del mismo predio, otros dos hombres ingresaron con las mismas intenciones. Mientras que Mangold, al igual que su familiar, era oriundo de San Cristóbal, ubicado a unos 50 kilómetros de Aguará Grande, los otros cazadores eran trabajadores rurales vecinos del lugar.

“Coincidieron en el mismo predio porque es habitual entre cazadores pasarse el dato de dónde hay chancho jabalí para cazar en el monte. Tanto la víctima como su familiar y los otros dos coincidieron en el mismo potrero de un campo”, comentó al respecto la fiscal Silvina Verney, a cargo de la investigación, en diálogo con LT10.

En ese sentido, la funcionaria judicial aclaró, respecto de los lugareños, que “a veces piden permiso como cortesía y otras veces ingresan sin autorización” a esos terrenos.

Fueron un movimiento repentino de un lado y un reflejo mortal del otro lo que se combinó para que la noche se tiñera de muerte. Mangold contaba con un visor nocturno, pero su victimario no.

Cuando el autor del disparo se acercó a lo que creía su presa animal, se dio cuenta de su grave error. Según informó Verney, él mismo llamó a la Guardia Rural y se quedó en el lugar para dar su confesión y colaborar con los investigadores tras la llegada de una patrulla de la Sección 13a de Huanqueros.

Fue imputado por homicidio culposo y se le concedió la libertad con restricciones.

En principio surge que fue un accidente. La pena del homicidio culposo va de uno a cinco años. Por eso no se pidió prisión preventiva, ya que el imputado colaboró desde el primer momento y no hay riesgo de fuga ni entorpecimiento probatorio”, explicó la fiscal en su entrevista radial.

Un hombre murió luego de ser atacado por un jabalí cuando cazaba en Mendoza

El sábado 22 de marzo, la tranquilidad de la localidad de El Carrizal de Abajo, en Luján de Cuyo, Mendoza, se vio quebrantada por un trágico suceso.

Un hombre de 43 años murió tras ser atacado por un jabalí mientras cazaba con un grupo de amigos.

La víctima, Diego Iván Cortez, sufrió múltiples heridas que lo dejaron gravemente herido y falleció días después en un hospital de la zona, según informó el portal MDZ.

El ataque tuvo lugar en un área conocida por ser un refugio natural para diversos animales salvajes. Cortez, quien se encontraba acompañado de varios amigos, había ido a la zona a cazar jabalíes, una actividad que, a pesar de ser común en la región, conlleva riesgos debido a la agresividad de estos animales. Lo que parecía una jornada más de caza, terminó en una tragedia para la familia de Cortez y sus allegados.

Según los testimonios de sus amigos, el grupo había logrado atrapar a un macho de jabalí, conocido como padrillo, un animal de gran tamaño y colmillos intimidantes. Para capturarlo, los cazadores utilizaron perros y armas de fuego.

El jabalí, sin embargo, demostró una notable resistencia. Aunque inicialmente parecía controlado, el animal logró liberarse y atacó con fiereza a Cortez, quien no tuvo tiempo de defenderse adecuadamente.

El ataque ocurrió en cuestión de segundos. Cortez sufrió lesiones graves provocadas por los colmillos del jabalí, que le perforaron distintas partes de su cuerpo. Sus amigos, al encontrarlo en estado crítico, lo trasladaron de inmediato a un centro asistencial. A pesar de los esfuerzos médicos, la gravedad de sus heridas y el daño provocado por el ataque fueron demasiado para que sobreviviera.