Este martes por requerimiento del Ministerio Público Fiscal (MPF), se desarrolló una audiencia con el fin de formalizar la investigación, formular cargos y solicitar medidas cautelares contra un hombre de 32 años, acusado de haber estafado por la suma de $ 12.000.000 a un frigorífico (situada en calle Lavalle al 2700 de la capital), donde trabajó como preventista hasta hace meses atrás.
La auxiliar de fiscal Paula Bellomio, en representación de la Unidad Fiscal de Usurpaciones, Estafas y Cibercriminalidad I, a cargo de María del Carmen Reuter, sostuvo que la calificación jurídica provisoria endilgada al sujeto es la del delito de estafa, en carácter de autor.
“Actuaba como vendedor y captaba nuevos clientes. Sobrefacturaba determinadas mercaderías o le pedía a la gente dinero por encima del valor del costo y después no le rendía cuentas a la empresa. Es decir, hacía distintos tipos de maniobras fraudulentas”, explicó Bellomio, que a continuación pidió que se ordenen medidas de coerción de menor intensidad (reglas de conducta) por el plazo de seis meses.
Lo demandado por la Fiscalía terminó siendo avalado por la jueza interviniente en su resolución.
La acusación
Entre el 5 de julio del 2022 y el 29 de febrero del 2024, el imputado era empleado de un frigorífico, donde cumplía funciones de vendedor ambulante al por menor de carnes rojas, menudencias y chacinados frescos.
En esas condiciones, llevó a cabo distintos tipos de comportamientos inadecuados a su función, como ser la aplicación de descuentos por pago en efectivo a los cuales no estaba autorizado y que nunca rindió cuentas a la empresa, así como también sobrefacturación a los clientes, obteniendo lucros indebidos al apoderarse de mercadería que no le correspondía.
En tal sentido, generó con su conducta un perjuicio económico de aproximadamente $ 12.000.000 a la empresa, para luego no volverse a presentar en su lugar laboral, desapareciendo, pese a haber sido intimidado vía telefónica y por carta a documento en su domicilio ubicado en El Colmenar./MPF
