Con la resolución de la Secretaría de Energía de la Nación ya publicada y en período de consulta, el esquema de subsidios cambiará de forma drástica y afectará a decenas de miles de hogares. Así lo confirmó Ricardo Ascárate, interventor del ERSEPT, en una entrevista con Los Primeros donde advirtió que entre 70.000 y 100.000 usuarios tucumanos perderán el subsidio en una primera etapa.
“Se elimina la clasificación N1, N2 y N3. Ahora solo habrá usuarios con subsidio y sin subsidio”, explicó. El nuevo criterio fija como límite ingresos familiares menores a tres veces el valor de la canasta básica. Quienes superen ese nivel quedarán automáticamente excluidos. Según Ascárate, ese filtro ya está generando rechazos crecientes en la base de datos nacional, incluso en casos donde los consumidores aseguran cumplir los requisitos.
Pero la pérdida de beneficiarios no es el único cambio. La Nación también reduce los topes de consumo subsidiado.
- Antes el beneficio alcanzaba a los primeros 350 kWh mensuales.
- Ahora, en los meses “críticos” (noviembre, diciembre y enero), el límite será de 300 kWh y solo con subsidio del 50%.
- En el resto del año —que la resolución llama “meses templados”, aunque Tucumán mantiene temperaturas elevadas— el tope caerá a 150 kWh, es decir, la mitad del consumo promedio provincial, que ronda entre 270 y 300 kWh mensuales.
“Esto es objetivamente una quita de subsidios”, remarcó Ascárate. “Van a subsidiar menos energía, en menos meses del año y con menor porcentaje”.
El funcionario también advirtió que el impacto será particularmente fuerte en febrero y marzo, meses que la Nación consideró “templados”, pese a que en el NOA las temperaturas superan los 36° y la demanda eléctrica se dispara.
A esto se suma un aumento en el precio estacional de la energía mayorista, que según el ERSEPT obligará a Tucumán a aplicar un incremento aproximado del 6% en diciembre. Las pequeñas y medianas empresas, así como los comercios e industrias con tarifas T2 y T4, sentirán el ajuste aún más por los cambios en los valores de potencia contratada.
Ascárate recordó que mientras el Gobierno nacional mantuvo los subsidios diferenciales para las zonas frías, no avanzó con el reclamo del Norte Grande de incluir a las provincias cálidas, que soportan los mayores picos de consumo en verano.
“En una familia tucumana, incluso con ingresos bajos, es prácticamente imposible consumir menos de 150 kWh en febrero”, enfatizó.
El funcionario anticipó que el ente deberá convocar a audiencias públicas por otros componentes tarifarios que vencen este año, aunque aclaró que la revisión del Valor Agregado de Distribución ya está programada para diciembre.
En un escenario de calor extremo y creciente demanda, Tucumán no solo deberá ajustar sus tarifas sino también absorber el golpe de decenas de miles de familias que quedarán sin subsidio en plena temporada de mayor consumo.
Fuentes: los primeros










